Los días de lluvia este punto negro vial genera innumerables accidentes, algunos de ellos con consecuencia fatales tal y como sucedió, el pasado 22 de octubre, cuando un cabo de la policía local de Boadilla falleció como consecuencia de una colisión en esta carretera.
El proyecto que se ha presentado mantendría la estructura actual de carretera de doble sentido pero acabaría con las curvas más peligrosas. La obra afectaría a un tramo no superior a los 500 metros, pero permitiría que el trazado fuera recto y, por tanto, más seguro.