Boadilla del Monte.- Cerca de medio millón de personas han visitado la muestra del escultor Juan Muñoz en los últimos cuatro meses de exposición en el Reina Sofía.
Más de 100 obras del escultor español, Juan Muñoz, se han exhibido desde hace cuatro meses en el museo Reina Sofía. El próximo lunes finalizará, después de recibir medio millón de asistentes.
El artista nació en Madrid en 1951 y falleció en Ibiza en 2001. Realizó sus estudios Croydon College de Inglaterra y en el Central School of Art and Design en la década de los 70. Después viajó a Nueva York para estudiar en el Pratt Center con una beca, en 1982, para volver a Madrid dos años más tarde y realizar su primera exposición.
La muestra postuma que se exhibe estos días en el Reina Sofía se trata de la retrospectiva más completa que el autor ha realizado hasta la fecha. El grueso de la obra se ha emplazado en la planta tercera del edificio Sabatini, recogiendo obras inéditas, desde esculturas hasta escritos, dibujos y obras radiofónicas.
No conformándose con el espacio disponible en las salas del museo, el visitante puede encontrarse con las esculturas del artista en cualquier lugar del edificio, como el jardín o el claustro.
Más de 100 obras del escultor español, Juan Muñoz, se han exhibido desde hace cuatro meses en el museo Reina Sofía. El próximo lunes finalizará, después de recibir medio millón de asistentes.
El artista nació en Madrid en 1951 y falleció en Ibiza en 2001. Realizó sus estudios Croydon College de Inglaterra y en el Central School of Art and Design en la década de los 70. Después viajó a Nueva York para estudiar en el Pratt Center con una beca, en 1982, para volver a Madrid dos años más tarde y realizar su primera exposición.
La muestra postuma que se exhibe estos días en el Reina Sofía se trata de la retrospectiva más completa que el autor ha realizado hasta la fecha. El grueso de la obra se ha emplazado en la planta tercera del edificio Sabatini, recogiendo obras inéditas, desde esculturas hasta escritos, dibujos y obras radiofónicas.
No conformándose con el espacio disponible en las salas del museo, el visitante puede encontrarse con las esculturas del artista en cualquier lugar del edificio, como el jardín o el claustro. 
