El Supremo archiva la querella de Panero contra Terol

El Supremo archiva la querella de Panero contra Terol

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha tomado la decisión de archivar la querella interpuesta por Arturo González Panero, alias “el Albondiguilla”, contra Antonio González Terol.


Panero atribuyó al actual regido del municipio los cargos de prevaricación, malversación de fondos públicos y tráfico de influencias, pero finalmente el tribunal ha desestimado la querella por “no ser los hechos constitutivos de ilícito penal alguno” y ha ordenado el archivo del mismo.

El exalcalde González Panero, implicado el la trama Gürtel, acusó al actual regidor de personar al Ayuntamiento en el caso de corrupción utilizando un procedimiento administrativo excepcional reservado para otros casos, además de no respetar los principios de transparencia y publicidad necesarios para garantizar el acceso a la oferta de contratación de otros posibles interesados.

En la querella de Panero también se argumentaba que el Consistorio dispone de un servicio jurídico que podría haber llevado el proceso en lugar de encargarlo a un abogado externo.

Por último, sobre el posible delito de tráfico de influencias, Panero ponía el foco en las anteriores contrataciones del mismo abogado por personas del entorno de González Terol.

Sin embargo, la Sala de lo Penal, ha desestimado la acusación asegurando que “en modo alguno el procedimiento utilizado para la contratación del servicio jurídico encaja con el delito de prevaricación”.

Sobre la decisión del Ayuntamiento de no utilizar los servicios jurídicos propios, la Sala no ha compartido los argumentos de Panero al considerar que “se trata de Letrados quizás muy cualificados, pero con una formación específica para el derecho administrativo local, y no, por tanto, necesariamente expertos en derecho penal”.

Ademas, al no considerar el Tribunal que haya un delito de prevaricación, no se puede derivar la comisión de un delito de malversación de caudales públicos.

Por último, sobre la acusación de tráfico de influencias, ya que el abogado elegido por el Ayuntamiento, Carlos Pelayo, había sido de la familia de Terol, el tribunal ha aseverado que “no parece ser más que una presunción sin verificación alguna de la misma”.

Puedes consultar el auto completo del archivo de la querella aquí.

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